María necesita comprarle una medicina a su hijo, pero no tiene efectivo. Visita varios cajeros; sin embargo, en ninguno consigue billetes. Trata de realizar un avance de efectivo en una panadería y el cajero del establecimiento le explica que no puede darle el dinero debido a que la Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario de Venezuela (Sudeban) prohibió a las entidades comerciales realizar dicha operación.
El organismo argumentó que la medida tiene la finalidad de combatir la crisis de efectivo que atraviesa el país desde hace meses.
“Nosotros acá con la banca pública y privada ya hemos empezado a tomar algunas acciones internas, pues tenemos conocimiento de que algunas agencias bancarias, en complicidad con algunos comercios, han utilizado esto como un negocio; se ha convertido en una práctica para las mafias”, dijo Antonio Morales, superintendente de Sudeban.
El economista y director de Econométrica, Henkel García, aseguró que la medida no se trata de un asunto económico sino político.
“Lo que podría estar detrás de esta decisión es la intención de llevar el efectivo que podía haber sido entregado directamente al público vía estos establecimientos hacia los bancos (…) esto ayudaría a subir un poco la cantidad de efectivo que manejan (los bancos)”, dedujo el economista durante una entrevista para El Nacional Web.
Explicó que el gobierno con esta medida garantizaría que las entidades bancarias tengan suficiente efectivo para que un pensionado o un trabajador que piense retirar su pensión o sueldo no se encuentre ante un banco sin efectivo.
“Que un pensionado vaya a un banco a cobrar su pensión y el banco no tenga plata es políticamente mucho más costoso que una persona no pueda ir a un establecimiento a retirar efectivo”, razonó García.
“El problema del efectivo es de monto total (…) pero este tipo de medida no te afecta en la cantidad de efectivo total, te la deja igual, lo único es que hay una especie de redireccionamiento”, añadió el economista.
El gobierno ha dicho que la crisis de efectivo en el país se debe a mafias de efectivo y el tráfico del papel moneda a través de la frontera colombo-venezolana. Sudeban informó que 30% de los billetes distribuidos por el Banco Central de Venezuela (BCV) se desvían hacia la frontera.
El economista Luis Oliveros tiene otra visión sobre por qué en Venezuela hay una crisis de efectivo.”El único responsable de la crisis de efectivo que hay en el país es el gobierno y el BCV”, sentenció.
Oliveros recordó que el Banco Central “no tomó las previsiones ni emitió suficientes billetes de alta denominación, sino que siguió emitiendo billetes de 100 bolívares y se tardó mucho en sacar billetes de más alta denominación”.
García estuvo de acuerdo con Oliveros en ese sentido: “El gobierno no pudo llevar el ritmo de la cantidad de monedas y billetes que necesita la economía con respecto al crecimiento de la masa monetaria”.
Masa monetaria: Cantidad de dinero disponible en una Economía en un determinado momento
El director de Econométrica dudó de la veracidad de las cifras ofrecidas por Sudeban con respecto a la cantidad de efectivo que se desvía a la frontera.
“Lo que pasa es que tú puedes ver cerros de billetes de 100 bolívares, que es lo que uno ve en las fotos. Eso no representa mayor monto en bolívares, su poder de compra es bastante bajo. Yo dudo que 30% del efectivo esté de aquel lado”, opinó.
García señaló a la baja masa de efectivo respecto a la masa monetaria total como el verdadero problema de la escasez de efectivo: “En los períodos en los que no había escasez de efectivo había 10%-12% de la masa de efectivo (respecto a la masa monetaria total) y hoy estamos en 7.5%”.
¿Cómo solucionar la escasez de efectivo?
Sudeban indicó que promoverá los canales electrónicos como medida para combatir la escasez de efectivo. Ambos economistas valoraron positivamente esta iniciativa, aunque señalaron que llevarla a la práctica no es tan fácil como declararla.
“Hay que tener presente que no todo el mundo está bancarizado y no todos tienen tarjetas de crédito o de débito, ni tiene acceso permanente a internet”, indicó Olivares.
“No necesariamente los puntos de venta en Venezuela funcionan de una manera rápida. Los bajones de luz, las fallas en la plataforma, los puntos de venta viejos, entre otras cosas, hacen que la infraestructura tecnológica en Venezuela deje mucho que desear”, añadió.
Olivares indicó también que a medida que la inflación acelera, también lo hace la necesidad de efectivo de la población. “Pagar un taxi o un estacionamiento te cuesta más efectivo, pagar productos que no necesariamente compres en los canales regulares, como productos ‘bachaqueados’, eso hace que la demanda de efectivo en una economía como esta aumente y siga aumentando considerablemente”, agregó.
García opinó que la intención de Sudeban apunta en la dirección correcta, pero que buscar solucionar la crisis de efectivo con los canales electrónicos es ingenuo.
“De la plataforma de puntos de venta, la sobrecarga de utilización de este sistema está trayendo problemas de usos operativos, hay veces que los puntos están muy lentos y es porque la misma crisis de divisas no ha permitido darle un mantenimiento a la plataforma de pago electrónico como es debido (…) esa solución tiene que venir acompañada por la adecuación de la plataforma electrónica», apuntó García, por lo que concluyó que los canales electrónicos no pueden ser entendidos como una solución a corto plazo.
Para el director de Econométrica, una solución más práctica sería imprimir más billetes del nuevo cono monetario. Calculó que para subir ese 7.5% de masa de efectivo respecto a la masa monetaria total hasta 12% sería necesario imprimir unos 434 millones de billetes del nuevo cono monetario, implementado en diciembre de 2016.
Según sus cálculos, publicados en Medium.com, son necesarias 158.4 millones de piezas de Bs 10.000. A su juicio, este es el billete que más se necesita.
Se requieren 141.1 millones del billete de Bs 2.000, 110 millones de billetes Bs 5.000 y 25 millones de Bs 20.000.
Por otro lado, los cálculos indican que hay 112.3 millones piezas de 100 bolívares de más en circulación, así como 8.4 millones de billetes del de Bs 500.