El Fondo Monetario Internacional «sigue completamente comprometido» a ayudar a Argentina, dijo un portavoz del ente este jueves. Pero una solución rápida es «difícil» por la incertidumbre, aseveró.
«Nos moveremos tan rápido como podamos e intentaremos hacer lo mejor que podamos para Argentina», dijo Gerry Rice, portavoz del organismo durante una rueda de prensa.
«Debido a la compleja situación y la incertidumbre política ha sido difícil avanzar rápidamente», añadió.
El país suramericano, sumido en una crisis económica y política, espera la liberación de 5.400 millones de dólares del programa de créditos del FMI, pero el miércoles el jefe encargado del fondo, David Lipton, dijo a Bloomberg que la relación financiera con Buenos Aires «tendrá que esperar».
Rice negó reportes de que el FMI había congelado su relación con Argentina. «Eso es incorrecto (…), las discusiones continúan», dijo.
44.000 millones de dólares
Kristalina Georgieva, nueva directora gerente del Fondo Monetario Internacional, se reunió este miércoles con el ministro de Hacienda de Argentina, Hernán Lacunza.
Aseveró que espera trabajar con Buenos Aires cuando asuma el cargo el próximo primero de octubre.
Desde el año pasado, Argentina recibió unos 44.000 millones de dólares del total de 57.000 millones de dólares del programa de créditos a 3 años del FMI aprobado en 2018.
Pero la inflación desatada y el aumento de la pobreza generó descontento contra las medidas de recorte adoptadas por el gobierno.
Los problemas económicos se agudizaron después de que, en el pasado mes de agosto, el peronista de centroizquierda, Alberto Fernández, quedó como claro favorito para ganar las elecciones del 27 de octubre en las que el mandatario Mauricio Macri intentará la reelección.