La economía chilena cayó 3,4% en octubre en relación con igual período del año anterior, informó este lunes el Banco Central.
Este es su peor registro en 10 años, debido a la inusitada crisis social que explotó ese mes que causó una dramática baja en el comercio y los servicios.
La caída del Índice Mensual de Actividad Económica, que proyecta el PIB, supera ampliamente las proyecciones oficiales y del mercado, en el que se había anticipado un descenso en torno a 1%.
El indicador mensual es también el más bajo desde 2009, cuando la economía local cayó 3,5% en la estela de la crisis financiera global.
La drástica paralización del comercio y los servicios luego del estallido social del 18 de octubre son las principales causas de esta caída, de acuerdo con el BC.
«La actividad económica del mes se vio afectada por el desempeño de actividades de servicio, comercio e industria manufacturera», informó la entidad monetaria.
Asimismo, el Banco Central agregó que la serie desestacionalizada disminuyó 5,4% respecto del mes precedente y 3,5% en 12 meses.
La crisis social comenzó con protestas estudiantiles contra el aumento en las tarifas del Metro. Sin embargo, escaló hasta convertirse en la revuelta social, con un saldo hasta ahora de 23 muertos.
Las manifestaciones se volvieron diarias y han derivado en violentos enfrentamientos con la policía, saqueos e incendios que han obligado a cerrar negocios, mientras que los grandes centros comerciales funcionan con horarios restringidos.
«El cuadro es una tormenta perfecta» que arrecia sobre la economía, dijo a la AFP el economista Francisco Castañeda.
Aseguró que la crisis causó una desaceleración muy brusca del crecimiento y el cuarto trimestre tendrá números negativos.
La tasa de desempleo mostrará un alza y la banca ya empezó a restringir créditos, complicando el panorama con la llegada del próximo año, agregó el analista de la Universidad de Santiago.
Las actividades más afectadas fueron educación, transporte, servicios empresariales, y restaurantes y hoteles, dijo el BC.
Un reporte del Scotiabank afirma que la economía local «habría perdido dos años de crecimiento en tan solo dos semanas».
Minería también a un menor ritmo
Durante octubre, el llamado «Imacec minero» creció 2% en una actividad que ha crecido a un menor ritmo de lo esperado, debido a los efectos de la guerra tarifaria que llevan adelante Estados Unidos y China, y que ha derrumbado el valor internacional del cobre, del que Chile es el principal productor mundial con casi un tercio de la oferta global.
Antes del estallido de la crisis social, las autoridades esperaban que el final del año tuviera un mucho mejor desempeño que en el arranque de 2019.
En el tercer trimestre, el Producto Interior Bruto chileno se expandió 3,3% y las autoridades esperaban cerrar el año con un crecimiento cercano a 2,5%.
Pero la crisis arrastró las proyecciones anuales, que hoy se sitúan en torno a 2%.
Con la economía en baja y los mercados inquietos, el Banco Central anunció una intervención del mercado cambiario hasta por 20.000 millones de dólares. La misma será desde diciembre hasta finales de mayo, con el fin de sostener el peso que en la pasada semana volvió a caer a su mínimo histórico, 828,36 unidades por dólar.
Este lunes, en el primer día de la intervención, el peso se recuperaba cotizando levemente por encima de las 800 unidades en las primeras horas de actividad cambiaria.
A mediados de noviembre, la entidad monetaria hizo un primer intento por aplacar a los mercados inyectando 4.000 millones de dólares a través de licitaciones a 30 días y 90 días, pero la especulación ganó la primer batalla obligando al BC a subir la apuesta.