De manera ilegal y en contra de la voluntad de la mayoría de los venezolanos, el 10 de enero Nicolás Maduro fue juramentado en el Tribunal Supremo de Justicia para asumir el cargo de presidente de la República por un nuevo período, afirma Conindustria en un comunicado.

“Expresamos nuestro firme respaldo a la Asamblea Nacional como la genuina expresión de la voluntad y de la soberanía del pueblo venezolano, que hoy anhela conseguir el camino para la restitución del hilo constitucional y del orden democrático, condiciones fundamentales para el restablecimiento del progreso económico y el bienestar de los ciudadanos”, indica el texto.

Agrega que ante tal circunstancia, la población se encuentra frente a un presente y un futuro inciertos en Venezuela. “Observamos con gran preocupación la inminente profundización de las insostenibles calamidades económicas, producto de la situación que atraviesa hoy el país”.

“Este trance institucional, que se inició el pasado 10 de enero, expone a Venezuela y a sus ciudadanos a los peores pronósticos y los somete a un injusto incremento de sus penurias. No es este el contexto más auspicioso para la recuperación de la base industrial y productiva del país, tal y como aspiramos quienes seguimos trabajando para el desarrollo y la prosperidad de la nación”, prosigue el documento.

Hace un llamado a la sociedad civil para que, a través de iniciativas enmarcadas en un ambiente de paz y tolerancia, respalden las acciones emprendidas por la Asamblea Nacional en la búsqueda de retomar el rumbo democrático que clama el país entero. “Todos estamos comprometidos en ese esfuerzo y los industriales venezolanos no somos la excepción. Confiamos en que la Asamblea Nacional podrá articular todos los esfuerzos orientados a resolver esta encrucijada histórica, para reconducir a Venezuela hacia un destino de progreso y libertad”.

Conindustria añade en el comunicado: “Hacemos votos para que todas las fuerzas políticas representadas en el Parlamento atiendan a la expectativa unitaria de la sociedad, actuando conforme a los principios que manda la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en favor de unas elecciones libres, democráticas y transparentes”.

El 11 de enero, Fedecámaras expresó en un comunicado que los eventos de día anterior sumergen a Venezuela en la “más severa crisis política e institucional de los últimos 60 años de nuestra historia” que, aunado a la crisis económica, integra un cuadro que debe llamar a la acción de todas las instituciones del país.

Recordó que el producto interno bruto cae otra vez en más de 15%, lo que acumula una caída en los últimos cuatro años de más de 56%, y afirmó que la calidad de vida de los venezolanos se ha deteriorado severamente, lo que ha elevado los índices de pobreza, hambre, reaparición de enfermedades ya erradicadas, muertes y, por consiguiente, un incremento de la diáspora.

El gremio empresarial hizo un llamado a actores sociales, económicos, políticos y a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana a apegarse a la Constitución, como único camino para solucionar la crisis. Señaló que la viabilidad del país se encuentra severamente comprometida por el desconocimiento del nuevo período presidencial no solo por parte de la mayoría de los venezolanos, sino de un importante número de países de los cuales muchos son socios comerciales.


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