Las bodegas de los sectores populares ya no son las únicas que venden huevos por unidad. Mercados municipales y comerciantes informales de San Martín, Candelaria, Petare y Catia ofrecen a los clientes la posibilidad de adquirir el alimento en las cantidades que puedan pagar.

“Las personas más pobres pueden resolver una comida comprando un huevo por encima de 1.000 bolívares, pero igual alguien debe ponerle control a esta situación porque todo los días le aumentan 100, 200 o 300 bolívares”, afirmó Rafael Romero, consumidor de El Paraíso.

El cartón de huevos de 30 unidades lo venden en Quinta Crespo entre 50.000 bolívares y 58.000 bolívares. Hace una semana costaba 45.000 bolívares, lo que representa un incremento promedio de 28,88%. A estos precios cada unidad saldría en 1.800 bolívares. En los mercados municipales el medio cartón cuesta 25.000 y en supermercados la docena 23.000 bolívares.

En La Florida vendedores informales venden 15 huevos por 21.000 bolívares. Un vecino de la zona, que pidió no ser identificado, indicó que el lunes de esta semana medio cartón costaba 19.000 bolívares y en un supermercado del sector Alta Florida la docena tiene un precio de 29.000 bolívares.

Adicional al tomate y la cebolla para la preparación de un perico se necesitan mínimo cinco huevos para igual número de comensales. Sin embargo, debido a los altos precios de los productos los compradores se han visto obligados a limitar el consumo del plato para rendirlos hasta final de mes.

“Los huevos están muy caros; por el momento solo puedo comerlos tres veces por semana”, manifestó un consumidor que se encontraba en Quinta Crespo.

A diferencia de los huevos, el precio del pollo se mantuvo estable durante el transcurso de la semana. Actualmente en el mercado de Quinta Crespo el kilo lo venden entre 29.500 bolívares y 33.000 bolívares, mientras que la semana pasada su precio era de 28.000 bolívares. “Los precios del pollo se han mantenido. Sin embargo, las ventas están regulares porque la inflación absorbe los ingresos de la gente, ahorita compran 1 o 2 veces por semana”, afirmó el encargado de un frigorífico.

Consumidores como Romero prefieren comprar el pollo entero por la diversidad de platos que les permiten preparar. Otras personas optan por adquirir muslos o pechugas por unidad. “Compré 3 muslos grandes en 60.000 bolívares, porque un pollo de un kilo no es suficiente. Para alimentar a mi familia debo comprar al menos 2 kilos y medio, y al pesarlo el precio supera los 100.000 bolívares y para mí es costoso”, afirmó una compradora.

En este mercado un kilo de pechuga de pollo lo venden entre 36.000 bolívares y 40.000 bolívares por kilo; en supermercados vale 58.000 bolívares con hueso y el kilo de pechuga sin hueso tiene un precio de 70.000 bolívares. La milanesa de pollo la comercializan en 55.000 bolívares, el kilo de muslos ronda los 35.000 bolívares y el del picadillo, en 35.000 bolívares.

Luis Campos, chef de profesión, indicó que su familia come pollo dos veces al mes por el alto precio del producto. Explicó que le resulta beneficioso comprar curvina (pescado) en Quinta Crespo, porque en filete o en ruedas le puede rendir para tres comidas y su precio máximo es de 40.000 bolívares.

Un vendedor en Quinta Crespo manifestó en vista de lo costoso del pollo entero, la pechuga y el muslo, que la mayoría de las personas compra carapacho (10.000 bolívares el kilo), patas de pollo (15.000 bolívares el kilo), el hígado de pollo (30.000 bolívares el kilo) y la molleja de pollo (30.000 bolívares). “Con un kilo de patas de pollo preparo dos comidas y si me queda le doy a los gatos abandonados que merodean por mi casa”, indicó Carmen Álvarez.

En relación con las alas de pollo, en mercados municipales cuesta entre 33.000 bolívares y 35.000 bolívares el kilo; en supermercados tiene un precio de 42.500 bolívares. “Ya no podemos regalar nada, una ala de pollo cuesta 2.000 bolívares”, expresó un vendedor a una cliente que transitaba por Quinta Crespo.


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