Medalla de oro olímpica, récord mundial y el trofeo de la Liga de Diamante. 2021 de Yulimar Rojas fue brillante y ahora espera que su reinado en el salto triple se extienda al salto largo para convertirse en imperio.
«Ha sido un año perfecto, súper cargado de éxitos, pero pienso que mi mejor versión siempre, cada año, se renueva. Trato de ser mejor cada día, ser mejor atleta, mejor persona, siempre hay un día más para ser mejor, autoevaluarse y mejorar (…). Puede haber una mejor Yulimar Rojas», comentó hace unos meses la atleta de 26 años, en entrevista con la AFP durante una visita a su natal Caracas.
El pasado 1 de agosto, Rojas ganó la presea de oro del salto triple femenino en los reprogramados Juegos Olímpicos de Tokio-2020 e impuso en esa cita un récord mundial de 15.67 metros, que machacó la vieja plusmarca de 15.50 de la ucraniana Inessa Kravets, vigente desde 1995.
Su superioridad fue notable, con la plata en las manos de la portuguesa Patricia Mamona, con 15.01 metros, y el bronce en las de la española Ana Peleteiro, con 14.87.
«Es Godzilla y yo soy un chihuahua», dijo entre risas Peleteiro a la prensa refiriéndose a Rojas, con quien entrena a diario en España, en donde ambas pertenecen a la sección de atletismo del FC Barcelona.
El oro olímpico era una cuenta pendiente para esta caraqueña criada en una barriada pobre cercana a la ciudad costera de Puerto La Cruz (este), después de haberse quedado con la plata en Rio de Janeiro 2016, en tiempos de dominio de la colombiana Caterine Ibargüen.
«No estoy apurada»
Ambiciosa, Rojas se traza la meta de ser la primera mujer que rompe la barrera de los 16 metros.
«(Debo) corregir algunos detalles técnicos (…), porque la fuerza, la potencia, la velocidad están», proyecta esta morena de 1.92 de estatura, que considera tener las condiciones para quebrar ese techo. «No es fácil, porque se necesita tiempo, entrenamiento, y es algo que se logra en su momento, poco a poco. Yo no estoy apurada».
Rojas es la primera mujer de Venezuela en conseguir un oro olímpico, uniéndose en la corta lista de deportistas de este país que han subido a lo más alto del podio al boxeador Francisco ‘Morochito’ Rodríguez en México 1968, el taekwondista Arlindo Gouveia en Barcelona 1992 y el esgrimista Rubén Limardo en Londres 2012.
Poco más de un mes después de convertirse en campeona olímpica, la venezolana conquistó su primera Liga de Diamante, en Zúrich, con marca de 15.48 metros.
Los triunfos de 2021 ampliaron un palmarés que incluía dos campeonatos mundiales (2017 y 2019) y otro par de títulos del orbe en pista cubierta (2016 y 2018).
«Atleta de retos»
Con su contagiosa sonrisa y sus ganas de bailar a donde quiera que va, Rojas celebraba sus éxitos en Venezuela cuando soltó la bomba con la vista puesta en el ciclo hacia los próximos Juegos Olímpicos.
No solo buscará en París 2024 revalidar su oro en el salto triple, sino que también tratará de colgarse otra medalla dorada en una segunda prueba, el salto largo. «Yo soy una atleta de retos. Si es por mí, iría en dos pruebas. Es lo que tengo previsto. Es lo que tengo pensado… salto triple y salto largo», anunció en un acto en el que recibió una condecoración del gobierno.
Rojas ha venido acercándose al salto largo de la mano de su entrenador, el cubano Iván Pedroso, una leyenda de esa especialidad con el oro olímpico en Sydney 2000 y cuatro campeonatos mundiales.
Ha comenzado de forma prometedora. El 13 de junio hizo marca de 7.27 metros, en La Nucia, España, aunque el viento a favor (+2.7) impidió que fuese homologada. Su mejor salto válido es de 6.88.
La alemana Malaika Mihambo ganó la medalla de oro del salto largo en Tokio-2020 al aterrizar a 7.00 metros de la línea de salto, mientras la estadounidense Brittney Reese se colgó la de plata (6.97 / +0.1) y la nigeriana Ese Brume la de bronce (6.97 / +0.4).