Mientras Yulimar Rojas está enfocada en Tokio en la medalla de oro, su familia la ve atenta en televisión desde el estado Anzoátegui.
En un video publicado en la cuenta oficial de la atleta, sus padres y sus hermanas, vestidos con prendas de la bandera de Venezuela y con la Bandera detrás, le expresaron su apoyo.
“Vamos, hermana. Vamos, Yuli”, dicen sus familiares, hasta cerrar en coro con un emocionante “vuela, Yuli, vuela”.
🇻🇪 Desde Anzoátegui, Venezuela.
Este es el mensaje que le envía la familia de Yulimar Rojas a la campeona mundial 🇻🇪❤ @TeamRojas45 en su camino a la gloria olímpica.#JuegosOlimpicos pic.twitter.com/bpGdpDstDN
— Yulimar Rojas (@TeamRojas45) July 30, 2021
#Tokyo2020 El corazón del @teamrojas45 presenciando desde Oriente los saltos de la Reina Yulimar Rojas en los #JuegosOlimpicos
¡Vamos!#FlyYuliFly #TeamVenezuela 🇻🇪 pic.twitter.com/Y6wt27x0VH
— Yulimar Rojas (@TeamRojas45) July 30, 2021
Rojas logró marca de 14.77 metros este viernes en su primer intento en las preliminares para clasificar a la final del triple salto femenino del atletismo de Tokio-2020, un evento en el cual es la máxima favorita al oro.
Se necesitaba una marca de 14.40 para avanzar de manera directa.
La multicampeona mundial Rojas saltó en el noveno turno y fue la primera finalista de su especialidad.
Rojas, líder mundial del año con 15,43, fue subcampeona olímpica en Río 2016, por detrás de la colombiana Caterine Ibargüen.
Junto a ella también clasificaron la propia Ibargüen y Ana Peleteiro, campeona de Europa en sala. Se verán las caras el domingo en la final olímpica de triple salto
Las tres compitieron en el mismo grupo A, pero cada una encontró un grado de dificultad diferente para acceder a la lucha por las medallas.
Peleteiro necesitó dos intentos. La plusmarquista española (14,73), y campeona de Europa en pista cubierta en Glasgow 2019, estaba “ansiosa por competir” en sus primeros Juegos.
Mientras que Ibargüen, cinco años después de coronarse en Río 2016, llegaba a Tokio de puntillas, con una marca del año impropia de su categoría (13,86) que la relegaba al puesto 57 de la lista mundial de una temporada de recuperación de sus lesiones.
En su primer salto ya superó los 14 metros (14,02) y mejoró seis centímetros en el segundo, pero antes del tercero estaba fuera. Tuvo que sacar lo mejor de sí misma para situarse tercera de grupo, por detrás de Yulimar y Ana, y certificar su plaza en la final.