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Foto Archivo

El San Lorenzo de Almagro alcanzó a igualar este miércoles la contienda frente al Universidad de Chile (1-1) en el choque de ida por la Fase 2 de clasificación a Copa Libertadores. El resultado deja en ventaja al conjunto argentino que buscará cerrar la llave en casa.

El técnico venezolano Rafael Dudamel dijo estar confiado de poder ganar la llave en el partido de vuelta en Buenos Aires.

«No hipotecamos para nada la llave. Esto es de 180 minutos y seguimos teniendo las mismas opciones que al principio. Confiando en la capacidad del equipo que se ha preparado muy bien en estas semanas. Tenemos confianza, convicción e inteligencia emocional para darnos cuenta que son 180 minutos», reconoció el DT en conferencia de prensa.

A su juicio, el equipo dio una demostración de compromiso y competitividad a pesar de los múltiples obstáculos que enfrentaron.

“Me voy orgulloso de la manera en que los jugadores trabajaron el partido. Esperar el mejor nivel colectivo en el primer partido era absurdo, pero sí dimos una demostración de compromiso. Nos mantuvimos compuestos y estables. Vamos a crecer mucho y la vuelta va a ser bastante interesante», añadió.

El encuentro

Los dos goles que vio el partido llegaron en los minutos finales, con el delantero Ángelo Henríquez adelantando a los locales en el minuto 76. El gol abrió un partido que había sido bastante trabado hasta entonces y apenas dos minutos después Franco di Santo empató el choque para los azulgrana.

El ariete argentino aprovechó un rebote dentro del área luego de un tiro libre y definió cruzado sin problemas frente al guardameta Fernando De Paul.

El partido de la Copa Libertadores comenzó con un aviso del San Lorenzo a los seis minutos del inicio con un cabezazo conectado por el centrocampista Juan Ramírez.

No fue hasta el término de la primera mitad que la «U» desplegó sus alternativas ofensivas y salió del campo propio. Allí estuvo replegado tras la iniciativa mostrada por los pupilos de Diego Omar Dobeva.

Marcelo Cañete, volante ofensivo de la Universidad de Chile, jugó un papel fundamental para los azules y marcó el ritmo de ataque con múltiples enganches, pases bombeados y tiros de media distancia

A los 50 minutos de juego, el defensor argentino Alejandro Donatti conectó un cabezazo en el corazón del área chilena sin convertir.

La réplica, en los pies de Cañete, fue un disparo de casi 30 metros de distancia que José Devecchi salvó con un manotazo al tiro de esquina.

A pesar de tener un hombre más en cancha tras la expulsión del azulgrana Diego Braghieri por una violenta infracción a los 62 minutos, el Universidad de Chile no hizo sentir el volumen ofensivo durante la última parte del juego y el marcador no volvió a moverse.

El partido de vuelta está programado para la noche del próximo miércoles y se jugará en el Estadio Pedro Bidegain, ciudad de Buenos Aires.

Con información de EFE.


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