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Personas se toman foto con el trofeo de la UEFA Champions League. Foto: PATRICIA DE MELO MOREIRA / AFP

Uno persigue el trofeo desde hace 10 años, el otro sueña con lograrlo por primera vez. El sábado en Oporto, en la final de la Champions League entre Manchester City y Chelsea, chocarán dos viejos conocidos que se admiran, Pep Guardiola y Thomas Tuchel.

Una victoria en Oporto, Portugal, supondría para el español convertirse en el cuarto técnico que ha ganado tres veces la Champions, un club exclusivo que forman Bob Paisley, Carlo Ancelotti y Zinédine Zidane.

Vencedor en 2009 y 2011 con el Barcelona, el club de su vida, en el que debutó como entrenador (2008-2012), Guardiola no fue capaz de volver a ganar, ni con el Bayern Múnich ni con el Manchester City.

Sus éxitos nacionales –6 títulos de campeón, 3 copas, 4 copas de liga inglesa– contrastan con las decepciones en la gran competencia.

Luego de tres derrotas consecutivas en cuartos de final con el Manchester City, en las que sus elecciones tácticas fueron muy discutidas, ahora tiene la ocasión de borrar las críticas.

“Algunos clubes necesitan varias finales para ganar una, otros solo necesitan una oportunidad. Espero que este sea el caso para nosotros”, señaló hace unos días, consciente de que el Manchester City y sus propietarios esperan desesperadamente el título continental.

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El Manchester City tiene enfrente a Tuchel

Enfrente estará Tuchel, ya finalista el año pasado con el PSG, sufriendo una derrota 1-0 ante el Bayern Múnich.

Despedido del club francés en Navidad, resurgió un mes más tarde con el Chelsea, que entonces sufría en el campeonato, para llevarlo de nuevo a la Champions.

Además de asegurar la participación en la gran competencia continental el próximo año, el Chelsea jugó y perdió la final de la Copa frente al Leicester, y se mostraron intratables en Champions, eliminando al Atlético y al Real Madrid con gran superioridad.

“Si alguien me hubiera dicho en Navidad, no sé si le hubiera creído o si me hubiera reído de él”, señaló en la página de la UEFA recientemente.

Pero en las últimas semanas el Chelsea parece haber perdido fuerza, cayendo 2-1 ante el Aston Villa en la última jornada de la Premier League, lo cual le impidió subirse al podio, además de la derrota 1-0 en la final de Copa.

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Josep Guardiola en la rueda de prensa previa al partido. Foto: Handout / UEFA / AFP

Viejos conocidos

Ambos técnicos son auténticos perfeccionistas de la táctica, y se conocen bien de Alemania, cuando Guardiola dirigía al Bayern, mientras que Tuchel pasó del Maguncia al Borussia Dortmund.

“Trabajaba en el Bayern y él organizó una cena en Múnich. Hablamos de fútbol, fútbol, fútbol y fútbol”, reconoció Guardiola.

“Aprendí mucho. Buena comida, buen vino, siempre es un buen momento para compartir. Es un buen recuerdo. Después hemos crecido y tenemos una buena relación”, añadió.

Tuchel había seguido los partidos del Barcelona de Guardiola “para aprender, sobre todo la defensa y el ataque”.

“Son muy similares”, señaló el centrocampista del Manchester City Ilkay Gundogan, que coincidió con Tuchel en el Dortmund.

“Son dos grandes entrenadores, a un nivel táctico muy alto. Los dos son capaces de gestionar las dificultades que pueden encontrarse durante un partido”, añadió el alemán.

Tuchel, que considera al Manchester City una referencia para su equipo, tiene dos victorias sobre Guardiola este año, 1-0 en Copa y 2-1 en el campeonato.

“¿Es que esto nos dará una gran ventaja? No, absolutamente no, somos conscientes de que es una final, partimos desde cero”, añadió.

El entrenador alemán Thomas Tuchel pronostica un partido sufrido. Foto: Handout / UEFA / AFP

No es un duelo cómodo

“Sé exactamente la manera en la que queremos jugar o con quien vamos a jugar. Sé exactamente lo que decir. Los chicos estarán ansiosos o nerviosos, les diré que es normal. Hay que gestionar eso. No es algo malo, pasa. Y habrá chicos que estarán más tranquilos y relajados también. Todo el mundo va a intentar gestionarlo de la mejor manera para disputar el mejor partido”, señaló Guardiola en la rueda de prensa previa al encuentro.

“Todo el mundo quiere ganar, pero para ganar hay que jugar. Y a veces queremos jugar de una manera, pero el fútbol y el adversario te imponen otra cosa, hay que adaptarse a las circunstancias. Estoy bastante convencido de que habrá que sufrir para ganar la final. Decir que hay que disfrutar está bien, pero a veces no es posible. La mayor parte del tiempo hay que sufrir, mostrar resiliencia, adaptarse a los malos momentos del partido que van a llegar. Mañana será un partido con dinámicas, no serán 90 minutos con un equipo ejerciendo un dominio total. Pero daremos lo mejor para que sea una buena publicidad del fútbol”, señaló.

“Sentimos que tenemos confianza de verdad, es un buen sentimiento antes de la final. Quiero que mis jugadores sean valientes, que estén activos, que defiendan y ataques con agresividad. No quiero lamentos al final del partido”, advirtió Tuchel.

“Somos muy conscientes de que el Manchester City y su entrenador constituyen una referencia. Pero sabemos también muy bien que en el fútbol hay siempre una manera de reducir las diferencias. Les hemos derrotado dos veces esta temporada. Es el reto para mañana (sábado). Lo hemos hecho con valentía, sufriendo juntos, con mucha calidad y convicción”, subrayó.


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