El puertorriqueño Lino Rivera, manager de los Toros del Este de la República Dominicana, destacó como «el mejor acontecimiento en mi carrera» el título de la Serie del Caribe 2020 que obtuvo al vencer 9-3 a los Cardenales de Lara de Venezuela.
«No puede suceder nada mejor. Es el mejor acontecimiento de mi vida», expresó Rivera a periodistas luego del triunfo en el Estadio Hiram Bithorn, en San Juan.
Rivera: «Este equipo es el mejor que he dirigido en mi vida»
«Este equipo, aparte del talento, sabía ganar y vencer las adversidades y lo logramos. Era el mejor juego que íbamos a tirar. Este equipo era sin lugar a dudas, el mejor que he dirigido en mi vida», admitió el piloto boricua.
Es el primer título de Rivera en Serie del Caribe, después de fallar en cuatro ocasiones anteriores.
Es además el primer campeonato de los Toros del Este en una Serie del Caribe y el primer título de un equipo dominicano en este clásico caribeño desde el año 2012.
«Esto ha sido la bendición más grande para mí y mi familia», agregó Rivera acompañado de sus hijos en el terreno del estadio sanjuanero.
Se quitó el sombrero ante Lara
La escuadra dominicana dominó el partido de principio a fin y hasta tuvo ventaja de 6-1, pero Venezuela respondió en la séptima entrada y acercó el marcador 6-3, pero los quisqueyanos sumaron tres anotaciones más en el octavo episodio para ampliar el marcador 9-3 hasta el último ‘out’.
«Me quito el sombrero ante Venezuela que peleó hasta el octavo, pero después lo abrimos», resaltó Rivera.
El guardabosque central Abraham Almonte fue el mejor bateador por la escuadra dominicana, al batear de 4-3, con tres impulsadas.
Por su parte, el inicialista dominicano Peter O’Brien fue escogido el «Jugador Más Valioso» de la serie final.
Una temporada de ensueño
Rivera, a su vez, recordó que desde que salió de Puerto Rico hacia la República Dominicana en septiembre pasado para cumplir con su compromiso con los Toros, soñó en coronarse campeón.
«Lo logramos. Fue una temporada de ensueño. Cuando esto comenzó, uno no se esperaba tantas cosas. Fue con la ayuda de Dios todo el tiempo. Este equipo fue extraordinario, no solo en la temporada regular, sino todo el tiempo», afirmó.
Igualmente dijo que durante su experiencia como dirigente de los Toros, se le presentaron varias adversidades, entre ellas, el fallecimiento de su padre el pasado 23 de diciembre.
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Un momento lleno de sentimiento
«Me da mucho sentimiento en este momento, porque estoy seguro que el hombre más feliz pudo haber sido él, pero así lo quiso Dios, que me ha hecho mejor hijo y mejor ser humano para que en algún momento mis hijos digan que fui un buen padre», abundó.
«Yo sabía que hoy íbamos a ser mejor, con paciencia y la selección de picheo. Era cuestión de tiempo y logramos tirar el mejor juego», puntualizó.
O’Brien, por su parte, agregó que desde el primer día con los Toros, reconoció que el equipo se mostraba «bien positivo, con confianza y por eso estamos aquí ahora».
El inicialista contó que jugó con los Toros toda la temporada regular, postemporada y Serie del Caribe para «mejorar como pelotero, ser más consistente y esa era mi meta desde el primer día».