La Cibeles se ha quedado la noche de este jueves sin el calor de la hinchada blanca que acude en masa tradicionalmente a este punto de la capital para celebrar sus títulos, aunque la diosa viste una bufanda y una bandera con los colores del Real Madrid por la victoria en La Liga Española 2019-2020.
Los aficionados del Real Madrid han seguido las recomendaciones de las autoridades y han festejado el trigesimocuarto trofeo liguero del club blanco, el undécimo título para Zinédine Zidane, sin acudir a la tradicional fuente madrileña tras el triunfo por 2-1 ante el Villarreal que ha cerrado la conquista a falta de una jornada.
Poco después de que el canario Hernández Hernández haya pitado el final del partido, algunos turistas que pasaban por la céntrica plaza de Cibeles, en la intersección de la calle Alcalá con el Paseo del Prado, han hecho sonar sus cornetas para celebrar la copa que le acredita como el mejor equipo de la temporada.
Tras los tantos del francés Karim Benzema para sumar la décima victoria consecutiva del Real Madrid en Liga, dos operarios del Ayuntamiento de la capital, escoltados por la policía municipal, han subido a la fuente para vestir a la diosa con una bufanda y una bandera del club blanco.
La plaza de Cibeles, epicentro de la capital, registraba así en los primeros momentos tras la victoria blanca poca afluencia de aficionados, después de que el club anunciara que los jugadores del Real Madrid no acudirán a la fuente a celebrar el título.
La diosa Cibeles y las calles aledañas han estado custodiadas por un dispositivo preventivo de más de 200 agentes de la policía nacional, junto con el apoyo de la policía municipal de Madrid, con el fin de evitar la concentración de aficionados.