Antoine Griezmann está en el FC Barcelona tal y como él lo dispuso. Llegó en el pasado mercado de fichajes por una cifra de 120 millones de euros y todo llevó a pensar de inmediato en la dupla que haría con Lionel Messi. Sin embargo, existe un hándicap que el francés confirmó y es el poco trato que hasta hoy ambos mantienen.
«Al final no es alguien que habla mucho, yo tampoco, así que es difícil que nos hablemos. Le he llevado algún mate, así que estamos en la buena dirección. Hay que aprender de la conexión, mejorarla. Aquí estoy para ayudar», expresó el galo.
Estas declaraciones, previas al compromiso de este martes contra el Inter de Milán, se dan en un contexto en el que se ha hablado mucho en el entorno culé sobre un aislamiento de los “pesos pesados” del vestuario al delantero.
Siempre hay “pesos pesados”
Justamente este es otro de los temas que en Cam Barca ha sido motivo de debate en los días anteriores. El artículo de Xavier Bosch, publicado en Mundo Deportivo, en el que hablaba de un poder excesivo de algunos jugadores en el vestuario culé y la siguiente respuesta de Gerard Piqué encendieron el termómetro.
A todo esto se quiso incluir Griezmann y se atrevió a hablar de la supuesta influencia de futbolistas en el equipo y argumentó que para él es normal en cada club que estuvo.
«Gabi y Godín también tenían poder en el Atlético. Es gente que está en este vestuario desde hace mucho y se les escucha cuando hablan”, dijo.
Y agregó: “Es como en todos los equipos, o los vestuarios que yo he conocido. Hay algunos jugadores a los que se les escucha más, pero es normal».
Adaptación
El francés está viviendo el sueño de jugar en el Barcelona, tal y como lo expuso en el momento de su fichaje. Sin embargo, pasar de un equipo con la idea de Simeone a otro con una filosofía distinta ha costado para el proceso de adaptación en el delantero.
«Me siento cómodo, pero todavía necesito mejorar en el campo, sobre todo mis movimientos. Tengo que entrar más en juego, y mejorar cosas por banda”, apuntó.
Además, el francés reconoció que la constante ausencias de muchos de sus socios en este inicio de campaña no ha ayudado mucho en el objetivo de conocer bien a sus compañeros en el campo.
«Siempre es más difícil cuando no está Ousmane, Leo, Ansu, Luis… no podemos trabajar en los entrenamientos ni en los partidos, así que tenemos que encontrar la manera de trabajar”, sentenció Griezmann.