Las Grandes Ligas de Beisbol y las Asociación de jugadores se reunieron la semana pasada para acordar el protocolo de bioseguridad que se seguirá en la temporada 2022-2023. En la reunión se acordó eliminar el requisito de pruebas frecuentes de covid-19 para todos, excepto para las personas con síntomas, informó la agencia The Associated Press.
Asimismo, se mantuvo la posibilidad de cambiar la sede de un juego en caso de que empeore la situación de la pandemia en el área. Aunque se relajó la cantidad de pruebas frecuentes de covid-19, se mantuvo el protocolo en cuanto a los juegos programados y las sedes.
Tal como establece el protocolo, las Grandes Ligas puede decidir reubicar equipos o reprogramar partidos en caso de considerarlo necesario. La decisión se puede tomar por motivos de seguridad para evitar contagios.
«Con el consentimiento del MLBPA (que no se negará indebidamente), Grandes Ligas también tiene derecho de realizar la postemporada en sedes neutrales (incluyendo estadios de otros equipos). O de aplazar el inicio de la postemporada con la finalidad de reprogramar partidos una vez que sea completada la temporada regular», señala el protocolo.
El reglamento también establece que ningún partido se pospondrá por cuestiones competitivas. Si el equipo cuenta con la cantidad suficiente de jugadores disponibles para reemplazar a aquellos que hayan dado positivo, el equipo debe jugar.