Jugando ante su público, el estadounidense Taylor Fritz asestó el domingo una inesperada derrota a Rafael Nadal en la final del Masters 1000 de Indian Wells, acabando con la racha de 20 victorias consecutivas del astro español, que compitió limitado por dolores en el pecho.
En la final femenina, la joven polaca Iga Swiatek se proclamó campeona ante la griega Maria Sakkari y aseguró su salto hasta el número dos del ranking mundial.
La resurrección de Nadal, baja durante buena parte de 2021 por su lesión en el pie, sufrió el domingo un insólito primer revés al caer 6-3 y 7-6 (7/5) frente a Fritz, debutante en la final.
Tras ganar el Abierto de Australia y erigirse en el tenista masculino con más títulos de Grand Slam (21), Nadal protagonizó también épicas victorias en su recorrido por Indian Wells antes de la final. El atleta estaba decidido a alzar un cuarto trofeo a sus 35 años.
En la final del Indian Wells, también renqueante de un tobillo, Nadal se rebeló ante la derrota durante dos horas en las que pugnó contra el fuerte viento y los dolores que padecía en el pecho.
«Es un tipo de dolor que me limitó mucho porque también afecta a mi respiración», describió después.
«Cuando respiro, cuando me muevo, es como una aguja todo el tiempo aquí dentro», dijo señalándose el pecho. «No sé todavía qué es».
Nadal comenzó a sufrir estos problemas la noche del sábado hacia el final de su batalla de tres horas ante su joven compatriota Carlos Alcaraz.
Sin tiempo para una revisión, Nadal volvió menos de 20 horas después para la final, en la que peleó hasta quedarse a dos puntos de forzar un tercer set.
Fritz, primer estadounidense en ganar en el desierto californiano desde Andre Agassi en 2001, también llegaba con problemas por la torcedura en el tobillo derecho que se hizo en la semifinal ante Andrey Rublev.
«Cuando entré en la cancha para calentar hice un intento y literalmente grité. Lo intenté dos veces más. Ambas veces tuve el peor dolor imaginable. Estuve casi llorando porque pensé que iba a tener que retirarme», recordó.
Tras recibir tratamiento, el tenista de San Diego dijo que logró competir en la final sin demasiadas limitaciones.
En una montaña rusa emocional, Fritz acabó celebrando su mayor triunfo a 160 kilómetros de su casa y contra el jugador al que vio dominar el tenis cuando era niño.
«Es una locura incluso estar en la misma pista con gente como Nadal o Roger (Federer). Mucho más ser capaz de vencer a uno de ellos, de ganar un torneo tan importante y hacerlo aquí en Indian Wells. Es una combinación de locuras que nunca creí posible», aseguró.
«Quería hacerlo perfecto»
Entre versiones de que podría anunciar su retirada, y 16.000 aficionados pendientes de su tobillo, Fritz sorprendió a todos con un inicio inmejorable de partido.
El californiano se avanzó 5-1 en el primer set con dos roturas del servicio de Nadal y dos juegos en blanco con su saque. Mientras el español lucía irreconocible en la pista.
Tras perder el primer set por 6-3, Nadal se marchó al vestuario acompañado del fisioterapeuta y señalándose el pecho.
El español regresó haciendo ejercicios para estirar el cuerpo pero seguía mostrando visibles problemas al ejecutar ciertos golpes, especialmente el revés.
Tras uno de sus errores, Nadal lanzó varios gritos para animarse y reaccionó quebrando a Fritz, pero el estadounidense había elevado su juego y su confianza.
El choque se decidió en un tie break de infarto en el que Nadal se colocó 4-5 y desperdició una volea clara en la red que permitió a Fritz ser el primero en derribarle este año.
Pese a la decepción de ver cortada su racha de inicio de temporada, solo superada en la ATP por Novak Djokovic, Nadal dijo que tratará de recuperarse lo antes posible.
«Quería hacerlo perfecto antes de la arcilla. Hubiera sido muy, muy bonito», afirmó. «Pero ahora es el momento de intentar solucionar este problema lo antes posible e intentar empezar con la arcilla. Estoy disfrutando de cosas que hace unos meses no pensaba que podría volver a vivir».
Swiatek, campeona y nueva número dos mundial
En la final femenina, la joven polaca Iga Swiatek derrotó por 6-4 y 6-1 a la griega Maria Sakkari. La polaca se confirmó como una de las grandes figuras ascendentes del circuito.
A sus 20 años, Swiatek suma el quinto título de su carrera, segundo WTA 1000 de este año tras Doha. La tenista sucede en el palmarés de Indian Wells a la española Paula Badosa.
«Estoy realmente abrumada. No pensaba que estuviera lista para jugar dos torneos seguidos y ganarlos», se felicitó la tenista de Varsovia-
Para Sakkari, de 26 años, era la primera final importante de su carrera. La atleta cayó en 2021 en las semifinales de Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos.
El duelo también definió cuál de las dos finalistas desbancaba en el número dos del ranking mundial a la checa Barbora Krejcikova.
«Siento que conseguir el número uno está cada vez más cerca», aseguró Swiatek.