Jesús Armando Vargas - Maradona
Foto tomada de Twitter

Todo era una fiesta el domingo en el “Juan Carmelo Zerillo” en Los Bosques de la ciudad de La Plata. Acababa de ganar Gimnasia y Esgrima La Plata 2-1 a Central Córdoba. La primera victoria de local en la Superliga Argentina 2019-2020, luego de 16 fechas y de la mano de la leyenda que mejor define al fútbol argentino, Diego Armando Maradona.

Una fiesta que tiene una silla reservada para la bandera venezolana, la cual lleva el merideño Jesús Armando Vargas, volante ofensivo del club que dirige “El Pelusa” y uno de los dos criollos que juega en la Superliga.

Joven (20 años de edad recién cumplidos) y menudo (1,68m de estatura y 68 kg), hace gala de la amabilidad que distingue al andino venezolano. No daba medio paso sin que el fanático del “Lobo” lo parara para saludarlo y sacarse una foto. Jesús Vargas tiene el reconocimiento del “hincha” (fanático) de Gimnasia, su casa desde febrero de este año cuando vino casi directo desde el Suramericano sub 20 de Chile, donde fue figura.

Cuando llegué tenía 19 años. Estaba nervioso, por primera vez salía de mi país para jugar con un equipo en el extranjero. Me adapté poco a poco al país y a Gimnasia. Ahora tengo 20 años. Me siento bien con todo, recuerda Vargas.

Llegó en febrero, cuando aún estaba Pedro Troglio

Sí pero a la semana lo cesantearon. Con él solo entrené, luego me dirigió y debuté con el “Indio” (Hernán) Ortiz. Jugué 5 partidos la temporada pasada, donde me fue bien. Después de esos partidos no pude jugar más.

Recibir consejos del “genio del fútbol mundial”

Diego Armando Maradona llega a Gimnasia la primera semana de septiembre para dirigir al club luego de 5 fechas negativas, donde Vargas no fue convocado. Para su primer juego (fecha 6) Maradona convoca a Jesús ante Racing Club de Avellaneda y lo pone en la cancha en el minuto 68. Lo ha convocado 5 veces más, poniéndolo en el campo en 4 de ellas (todas viniendo desde el banco).

No es la primera vez que Maradona entrena a un venezolano. En 1994 lo hizo con Gerson Díaz, cuando Diego dirigía al Deportivo Mandiyú durante el torneo Apertura.

¿Cómo fue la llegada de Maradona? ¿Cómo reaccionó?

Cuando nos enteramos, ninguno en el equipo lo creía. Si lo más veteranos estaban en shock, uno más. Es una locura tenerlo ahí, al lado. Nunca pensé que iba a tener a Maradona dirigiéndome. Estar con él, tenerlo de frente, su sola presencia es una motivación para todos. Con él estoy logrando un sueño, de los muchos que quiero hacer.

Maradona ¿qué le dice, qué consejos le da?

Me ha dado mucha confianza. Me dice “sea diferente a los demás haciendo lo que sabe hacer”, “encare cuando esté adelante”, “juegue a dos toques cuando esté en la media cancha”, “cuando tome una decisión, hágala sin dudar de ella”. Maradona me hace sentir cómodo.

¿Qué aportó para su juego la experiencia con Gimnasia?

La confianza.

Estudiantes de Mérida sale campeón y estaba en Argentina, ¿qué sintió esos días?

Fue mucha alegría la que sentí cuando salió campeón. No estaba allá, pero siempre los apoyé desde lejos. Algunos compañeros me escribieron diciéndome que yo también era parte de ese logro. Yo estoy muy agradecido con Estudiantes de Mérida y los compañeros que tuve, los felicito por su campeonato. Aprovecho para enviar mi saludo a Caucagüita de Mérida, donde me crié, a Estudiantes de Mérida, a toda Mérida y a Venezuela.

¿Selección Nacional?

El martes tengo que viajar para sumarme a la sub 23. Para mi es un orgullo vestir la camiseta de la selección nacional. Voy a darlo todo allá.

Por Ernesto Farrell

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