Vinotinto, casos de contagios. Foto: Cortesía
Imagen de la tribuna del estadio Olímpico de la UCV durante el partido de la Vinotinto contra Uruguay. Fotografía divulgada por el periodista Fernando Petrocelli

La Copa América 2021 tendrá un recuerdo agridulce para Venezuela. Antes del inicio de la competencia, al menos 13 miembros de la delegación de fútbol nacional se contagiaran de covid-19. ¿Mala suerte o irresponsabilidad?

«Es claro que tuvo incidencia (el brote), pero eso no impide que esté contento con la voluntad, las ganas y el empeño de los que jugaron, no estoy triste por perder», dijo el técnico de la Vinotinto, José Peseiro, al terminar el juego ante Brasil, que se saldó con una derrota 3-0 ante Brasil, en el estadio Mané Garrincha de Brasilia.

El hecho ha generado cuestionamientos sobre qué sucedió para que fallara el control de las medidas de bioseguridad entre los jugadores y cuerpo técnico. Algunos aseguran que el detonante fue lo que ocurrió en el partido Venezuela-Uruguay, que se disputó en el estadio Olímpico de la Universidad Central de Venezuela, en Caracas.

Giancarlo Figliulo, periodista, mencionó en su cuenta en Twitter algunas irregularidades que ocurrieron luego de este juego que terminó en un empate 0-0.

«¿Había necesidad de hacer una fiesta en la tribuna de la UCV con influencers, panas y otros? ¿Además tomarse fotos con los jugadores sin tapabocas en el estadio? ¿Era necesario recibir visitas al hotel? La burbuja de la Vinotinto tuvo demasiadas ligerezas. Hoy se sufre», escribió el 12 de junio.

En otro tuit, el locutor indicó: «Preocupante lo que ocurre con la Vinotinto. Sería bueno explicar cómo se manejó la burbuja durante su estadía en el país, muchas visitas y fotos hicieron ruido. Cómo se manejaron las pruebas y por supuesto los responsables de un brote así. No es mala suerte. Es responsabilidad».

Descuido antes, durante y después del partido de la Vinotinto

El también periodista Giuseppe Palmariello afirmó que hubo descuido. «Fue notorio antes, durante y después del partido de la Vinotinto. Un directivo importante de la federación uruguaya me lo dijo: ‘Nos sorprendimos con la cantidad de gente que había en el partido, pero no tenemos más nada qué decir'».

Richard Páez, técnico de la Vinotinto entre 2001 y 2007, manifestó su afrenta por lo sucedido. «En un país serio y organizado, esta vergüenza que se acaba de completar sería suficiente para que renuncien o destituir a todos los responsables. Pero en la Venezuela de hoy todo es normal», escribió en su cuenta de Twitter.

No hubo rigurosidad

En redes también han circulado algunas pruebas de cómo el distanciamiento social quedó en palabras en la tribuna del estadio, tal como lo compartió el periodista Fernando Petrocelli en su cuenta en Twitter.

El comentarista de Directv Sports también indicó que todo fue muy diferente cuando el Caracas F.C jugó en marzo contra el equipo peruano César Vallejo en la Copa Libertadores. «No dejaban a nadie entrar al hotel. Sin excepción. Si eso sucedía, el Caracas era multado, creo que con 12 mil dólares. Es evidente que la burbuja vinotinto no tuvo la misma rigurosidad que se requería. Y eso es inadmisible e indudable».

«Nadie va a saber cuándo y cómo se contagiaron los jugadores, es casi imposible demostrarlo, pero lo que es claro es que no se cumplieron los protocolos como se debía. La responsabilidad recae en todos», agregó.

Sin información certera sobre contagios en la Vinotinto

Pero el asunto va más allá. Tampoco hay información exacta sobre el número de miembros del equipo que contrajeron el virus. La Conmebol habla de 13 personas, mientras la Federación Venezolana de Fútbol dio un reporte de 11.

La situación obligó a los directivos de la FVF a llamar de emergencia a 15 jugadores de la liga local para viajar urgentemente a Brasil y ponerse la camiseta vinotinto de forma apresurada para el partido inicial contra el país anfitrión.

En Venezuela se quedaron jugadores que habían sido convocados inicialmente, la mayoría de ellos lamentando no haber podido representar a su país. En la lista aparece una de las bajas más significativas: el capitán Tomás Rincón.

«Lamento profundamente no poder representar a mi país, los que me conocen saben lo que he trabajado para aportar mi máximo a la Vinotinto en esta Copa América, pero siempre hay que priorizar mi salud y la de los que me rodean respetando los protocolos sanitarios y haciendo el aislamiento correspondiente para no poner en peligro a nadie», dijo el jugador del equipo italiano Torino.

El lateral Roberto Rosales también expresó su pesar por no poder tener unos minutos con la selección.

«Di positivo al covid-19. Estoy bien, con el dolor de no poder estar defendiendo a mi Vinotinto. Quien me conoce sabe que siempre he hecho hasta lo imposible por mi selección, pero en estos momentos debo apoyar desde afuera y desearle lo mejor a mis compañeros. Son momentos complicados. Sin embargo, hemos aprendido que juntos podemos llegar muy lejos y hoy todos estamos con ustedes. Gracias a quienes han estado preocupados por mi salud. Les mando bendiciones. Tengan por seguro que muy pronto nos vamos a recuperar. Somos guerreros», escribió en su cuenta en Instagram.

Por su parte, Josef Martínez, otro de los jugadores que se contagió, envió un mensaje de apoyo a sus compañeros: «Todo mis respetos, chicos».


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