Después de la renuncia de Rafael Dudamel a la Vinotinto, varios rumores han corrido sobre quién será su sustituto. César Farías, actual entrenador de Bolivia, es uno de los que más suena por los expertos y aficionados al balompié, junto con otros nombres como el de su hermano Daniel, Jorge Sampaoli, Diego Maradona y Jorge Luis Pinto.
El actual estratega de la selección boliviana, ex de la Vinotinto, a pesar de haber perdido contra Brasil en el Preolímpico sub-23 con un marcador de 5-3, supo hacerle frente a la Canarinha. El conjunto de Farías no desistió hasta los últimos momentos del encuentro, donde dejó claro que eran un equipo con personalidad, supo plantarse de la mejor manera y hacerse sentir en el campo.
Farías marca personalidad dentro de la cancha
La selección dirigida por el criollo se jugará su futuro para conseguir el cupo al sueño olímpico contra Perú. Mientras Brasil, ya clasificada a la fase final del torneo que concede dos plazas a los Juegos Olímpicos de Tokio, se medirá con Paraguay que depende de sí misma para pasar.
La Verde fue la sorpresa del torneo suramericano al vencer 3-2 a Uruguay, con goles de Moisés Villarroel de penal a los 25 minutos, Víctor Abrego y Luis Fernando Saldías en su primera salida de la justa que se disputa en Colombia.
Farías: «Jugamos con personalidad»
Farías reconoció que la victoria contra la celeste fue para cualquiera de los dos equipos. “Fue un partido que pudo ganar cualquiera, bien jugado, con intenciones claras de ataque por parte de ambos, Uruguay mostró su tradicional garra, pero nosotros jugamos con personalidad”, dijo.
“Estos son los momentos en que todo el sacrificio vale la pena. ¡Qué regalo nos dieron estos muchachos!”, escribió el entrenador sucrense en su cuenta de Twitter. “Creo en estos seres humanos extraordinarios que conforman este seleccionado, en la preparación que hicimos y en el compromiso que tenemos para lograr objetivos. Seguimos!”, cerró en la red social.
Los de Farías jugarán este viernes, en la última jornada, por la clasificación contra una selección peruana que también perdió, pero conserva sus opciones.
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Sus precedentes con la Vinotinto
El oriundo del estado Sucre dirigió la selección de fútbol de Venezuela, tanto en de las mayores como la juvenil en el periodo de 2007-2013, luego de la renuncia del director técnico Richard Páez.
Con la Selección sub-20 logró ir al primer Mundial de Fútbol de la historia venezolana, el de Egipto 2009 donde llegó hasta los octavos de final.
En la clasificación de la Conmebol para la Copa Mundial de Fútbol de 2010, el combinado nacional finalizó a tan solo dos puntos del puesto de repechaje. A pesar de ello siguió al mando de la selección nacional. Supo estudiarla mejor y pasó de un juego de más toques cortos y compenetración en las líneas, con este enfoque llegó a la Copa América 2011 donde la Vinotinto consiguió, por primera vez en la historia, el cuarto lugar de la competencia después de haber sido derrotado por Paraguay en la semifinal (en penales) y por Perú en el partido por el tercer lugar.
La hazaña en Buenos Aires es hasta ahora al mejor figuración que ha tenido Venezuela en una Copa América.
En la Clasificación de Conmebol para el Mundial de 2014 la selección nacional de fútbol quedó fuera tras culminar en sexto lugar de la clasificación luego de haber empatado en casa contra Paraguay (1-1).
Luego de haber culminado la eliminatoria, el técnico publicó por medio de su cuenta de twitter, que renunciaba a la dirección técnica el 30 de noviembre de 2013.
La selección de fútbol nacional tendrá que pagar una indemnización de 300.000 dólares a el conjunto del altiplano si Farías regresa a los banquillos del tricolor nacional, debido a que tiene contrato hasta 2021 con la Verde.