El venezolano Eduardo Rodríguez tuvo el domingo una de sus mejores presentaciones de la temporada. Durante seis episodios, en los que aisló una carrera, ponchó a nueve rivales. Su catcher, sin embargo, no fue esta vez Sandy León, su compatriota. Esta vez recibió sus pitcheos el puertorriqueño Christian Vázquez.
León ya no es el careta titular de los Medias Rojas. El manager John Farrell anunció el cambio de planes, en su reunión diaria con los reporteros que siguen los pasos del equipo. Allí, comunicó que Vázquez verá más acción en lo sucesivo.
El ascenso del boricua no tiene que ver directamente con el carácter de antiguo prospecto de la organización que disfrutó alguna vez el antillano. Se debe al contraste entre la ofensiva que ambos han desplegado.
León sólo trabajará ahora cuando lancen Rick Porcello y Chris Sale, informó el diario Boston Globe. Vásquez estará detrás de plato con los otros tres abridores, incluyendo a Rodríguez.
“Hay una buena relación entre Sandy y ellos dos”, explicó, dijo Farrell. “Pero (Vázquez) está haciendo un excelente trabajo en ambas áreas del juego. Se ve su destreza defensiva y ha tenido un rápido inicio ofensivo, lo que le ha permitido seguir construyendo su confianza”.
El puertorriqueño batea para .412/.444/.588, sin jonrones, mientras que León tiene una línea.180/.196/.280, con un cuadrangular.
“Me encanta lo que ha hecho y la forma en que está usando el otro lado del campo al batear”, elogió Farrell a Vázquez.
El estratega no desestimó del todo lo hecho por el venezolano, quien durante su carrera se ha destacado por ser un óptimo defensor.
“Sé que Chris se ha sentido cada vez con más comodidad cuando trabaja con él, confía mucho en el juego que Sandy llama”, razonó Farrell. “También ofrece algunas ventajas cuando forma tándem con Rick”.
León vivió un 2016 para el recuerdo. Cambiado a los Tigres de Aragua en la LVBP, fue pieza crucial para la obtención de la corona en Venezuela. Luego de eso, fue adquirido por los Medias Rojas en la MLB, tras varios años como tercer receptor de los Nacionales, y se apoderó de la titularidad cuando fue subido a las Grandes Ligas, en la segunda mitad del torneo.