Como ganar es la prioridad, los managers viven con la máxima de colocar a sus mejores brazos para el primer juego de una serie corta. Esos hombres elegidos son, de acuerdo con la teoría, los de mayor confianza y la secuencia los hace reaparecer si los enfrentamientos se alargan a un quinto compromiso. Ha llegado la hora de que los ases vuelvan a escalar los morritos.

En occidente. Junior Guerra demostró en el primer asalto del duelo aviar por qué fue la primera escogencia del draft de adiciones y sustituciones y su estatus actual con Cerveceros de Milwaukee. El derecho le dio 7.0 de paz a Cardenales, tras no permitirle anotaciones a Águilas, y solo aceptar 4 imparables, además de ponchar a 6 adversarios.

Logan Durán, iniciador rapaz para el choque de esta tarde (4:00 pm), en el Luis Aparicio “El Grande” de Maracaibo, no tuvo una apertura espléndida como su rival. Fue descifrado por los bates crepusculares (le dieron 5 hits) y tuvo una crisis con su control (3 boletos), todo eso en 3.2 actos. Los predicamentos desembocaron en 2 carreras limpias.

En el centro. La fiera batalla que se desarrollará en el José Pérez Colmenares de Maracay (5:00 pm), puede convertirse en una tensa pulseada entre dos brazos derechos. Guillermo Moscoso, iniciador de Tigres, y Luis Díaz, abridor de Leones, poseen todas las características para maniatar las intenciones que enfrenten.

El primero es uno de los candidatos más fuertes para el Pitcher del Año, por su 2.69 de efectividad en 73.2 innings en la ronda regular, un guarismo que se vio favorecido por su desempeño en casa: 1.95, 2-0, en 32.1 actos de labor.

El diestro caraquista le lanzó bien a Aragua en la eliminatoria. De hecho, solo le permitió una anotación en 13.0 episodios. No obstante, el beisbol no se apega a la rigidez numérica y ambos serpentineros se estrellaron el primer cotejo de la serie: ninguno completó cuatro innings. Moscoso fue castigado con 6 rayitas y Díaz con 3.

En oriente. Las historias de los abridores de Magallanes y Caribes en el primer juego fueron muy distintas al compararlas una con otra. Alex Sanabia, el escopetero turco, solo duró 2.2 capítulos en el centro del diamante y sufrió 6 carreras limpias, de las cuales 3 fueron producidas por jonrones de René Reyes y Luis Jiménez. La inconsistencia ha hecho que el manager Omar Malavé no lo haya confirmado aun volver a la lomita, en el Alfonso “Chic” Carrasquel de Puerto La Cruz (6:00 pm).

Daryl Thompson, el rostro del pitcheo aborigen, estuvo inmaculado en los 6.0 pasajes que retó a los cañones de la carabela. Lo demostrado por el estadounidense no es casual, pues en la ronda regular dejó efectividad de 2.57 en 73.2 innings, para ser el brazo más confiable en la tribu y uno de los mejores de la liga.

           


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