Ronald Acuña Jr. parece listo para saltar a las Grandes Ligas, salvo por un detalle: no hay lugar actualmente en el lineup de los Bravos para el súper prospecto venezolano, pese a su brillante temporada 2017 y a que es el valor emergente número uno en su organización.
La nueva gerencia de Atlanta está dando pasos que pueden cambiar el panorama a corto plazo.
Acuña es patrullero, puede jugar en el centro y las esquinas, pero los indígenas de la Liga Nacional cuentan con el veterano Matt Kemp en el left, Nick Markakis en el right y el zuliano Ender Inciarte en el center. Inciarte ha ganados dos veces el Guante de Oro y acaba de conectar 200 hits, lo que lo convierte en casi imprescindible, y Kemp tiene un mega contrato que hace difícil negociarlo.
Abrir el puesto de Markakis en la pradera derecha tiene que ser el objetivo de quienes muestran entusiasmo por ver en las Mayores al nativo de La Sabana a partir de abril próximo.
El primer paso ya se dio, de acuerdo con un reporte de MLB.com. No pasó más allá de conversaciones exploratorias, según el informe del periodista Jon Morosi, pero es indicativo del deseo del alto mando aborigen.
Morosi aseguró, citando fuentes gerenciales, que hubo un breve intercambio entre los Bravos y los Azulejos, divisa que busca bateo para compensar la pérdida de José Bautista en el mercado de agentes libres, la falta del dominicano Edwin Encarnación desde hace un año y la exigencia de competir en el duro Este de la Liga Americana.
Markakis fue el centro de discusión de ese primer diálogo. Está por entrar al último año de su acuerdo multianual, aunque con un salario de 11 millones de dólares que obligará a Atlanta a ser creativos para poder traspasarle.
Salir del guardabosques abriría arriba el cupo que actualmente no existe para Acuña, cuyo destino, a menos que eso cambie, es empezar la venidera zafra en Triple A.
El varguense es una poco usual mezcla de poder, defensa y velocidad. Trituró tres categorías en las Menores en 2017, desde Clase A avanzada hasta Triple A, fue llamado al Juego de Estrellas del Futuro y cerró como Jugador Más Valioso en la Arizona Fall League, el circuito de prospectos que la gran carpa organiza entre octubre y noviembre.
Tendrá solamente 20 años de nacido al reportarse para el Spring Training, una edad en la que la mayoría de sus colegas todavía se encuentra a medio camino en el sistema de granjas.