A través de redes sociales lo menores se exponen a constantes riesgos. La joven Carolina Hernández denunció que su hermana de 8 años de edad recibió un mensaje en TikTok por parte de “una red de tráfico de niños y de pedofilia”.
Hernández aseguró que la niña empezó a seguir en esa red social a una cuenta que ella pensaba que era la de la actriz Karol Sevilla, protagonista de Disney Channel. Acto seguido, la persona que está detrás de esta cuenta empezó a hablarle. Le indicó que si quería participar en un concurso, en el que podía recibir premios e incluso conocerla.
“Esta persona le empieza a decir a mi hermana que está haciendo un concurso para sus fans que si quiere participar. Mi hermana le responde que sí. Esta persona le pregunta de dónde es, dónde vive, cuántos años tienes. Mi hermana le empieza a responder estas preguntas y le dice que le va a contar a mis papás que va a participar. La persona le dice que no le puede contar a mis papás, que le puede contar solamente cuando se acabe el concurso”, detalla Hernández
La joven aseguró que pese a la advertencia, la menor de edad decidió contarles a sus padres lo que estaba pasando. En ese momento deciden contactar a las autoridades para contarles el caso y ellos les sugieren que creen una cuenta falsa de otra menor de edad. Así intentarían contactar la cuenta de TikTok, la cual aparecía como @Karol_Sevillaluna2.
“Efectivamente esta persona nos empieza a hablar, creamos un WhatsApp falso. La persona comienza a poner los supuestos retos y preguntas del concurso. Estas comienzan: cómo te llamas, cuántos años tienes, dónde vives, tienes mascotas. Después los retos: muéstrame una foto tuya, mándame un video y quítate los pantalones”, denunció.
Mi hermana de 8 años casi cae en una red de pedofilia. Y la única manera en la que se puede hacer algo es difundiendo esto en redes sociales, es demasiado fácil caer en esto y no quiero que ni un solo niño mas caiga… ayúdenme a denunciar con un RT!🙏🏻(Abro hilo explicando todo) pic.twitter.com/dHYeaa5jR4
— Caro Hernandez (@carolinah192) September 18, 2020
Hernández señaló que pese a que en su momento reportaron la cuenta, la cual alcanzó a tener más de 50.000 seguidores, TikTok no la había bloqueado. Ya no está disponible.
Medidas de seguridad
Carolina Botero, experta en derechos digitales y directora de la Fundación Karisma, indicó que ese tipo de hechos deben observarse desde varios factores. Entre ellos que cada red social es distinta y hay que mirar cada una de sus características.
Hay que tener en cuenta que las redes sociales cuentan con edades mínimas para la creación de una cuenta, por lo que hay menores de edad que no pueden acceder sin supervisión. Facebook estableció entre sus políticas de seguridad que la edad mínima para crear una cuenta es de 14 años. En el caso de Instagram, el límite está en los 13 años, al igual que en TikTok.
“El uso de Internet y las redes sociales debe estar acompañado por los padres. Son ellos los que irán poco a poco viendo la madurez de los menores para comportarse solos”, precisó Botero.
Asimismo, la experta aseguró que una de las cosas que siempre se debe establecer con los menores de edad es el tema de la confianza. Además, hay que hablarles de manera clara cuáles son los riesgos y escenarios que se pueden encontrar.
“En el caso de la niña de 8 años de edad, una de las ventajas es que ella, a pesar de que la persona le dice que no le cuente a sus padres, tenía confianza. Así que decidió hablarles”, detalló Botero. Aseguró que si los menores de edad tiene información y una comunicación abierta, los hace menos vulnerables a los peligros que hay en estos escenarios.
Por otro lado, Botero precisó que uno de los asuntos más importantes es educar y formar “jóvenes que tengan autonomía y capacidad crítica para entender los riesgos que corren”. También hay que entender que no se puede marginar a los menores de estos espacios, ya que “está claro que Internet da muchas ventajas que difícilmente se puede aislar”.
En estos escenarios, puntualizó la experta, una de las opciones que tienen los padres es la de, en compañía de los jóvenes, hacer los controles de seguridad. Así como también la respectiva configuración de la red social y reiterarles el espacio de confianza y diálogo ante cualquier hecho que les suceda.