Un breve vídeo enviado a la BBC muestra a las mujeres sentadas en el espacio reducido de un camión lleno de cajas de plátanos.

Actualización del 29 de septiembre: La fiscalía francesa confirmó posteriormente que el conductor del camión se detuvo por su parte en un área de estacionamiento y llamó a la policía tras escuchar lo que parecían voces.

La fiscalía también confirmó que el conductor no es sospechoso de ningún delito. Desde entonces, la compañía del conductor aseguró a la BBC que el chofer ayudó a la policía con todas sus preguntas y prestó declaración voluntariamente.

Fue liberado sin cargos y se le permitió continuar su camino.

“Ayuda, es urgente”, fue lo primero que escuchó una periodista de la BBC al responder una llamada en su teléfono.

Una llamada que ayudó a rescatar a seis mujeres que se encontraban en la parte trasera de un camión en Francia.

Las cuatro vietnamitas y las dos iraquíes, que se cree que son migrantes, estaban atrapadas en el interior, presas del pánico y luchando por respirar.

Una de ellas fue la que logró hablar desde el interior del camión con la BBC, que después logró alertar a la policía.

Un portavoz de la policía francesa aseguró la BBC que el conductor del camión estaba siendo interrogado.

Llamada de socorro

Hacia el mediodía del miércoles, la pantalla de mi teléfono se iluminó. Era un mensaje que decía: «Hay unas personas que han cruzado la frontera de Francia a Inglaterra en una camioneta frigorífica».

Antes de que pudiera terminar de leer el mensaje, entró una llamada.

«¿Estás en Europa? Por favor, ayuda, es urgente», me hablaron con una voz de pánico.

Sentí frío en todo el cuerpo. Todavía tengo fresca en la memoria la trágica historia de los 39 inmigrantes vietnamitas hallados muertos tras asfixiarse en el remolque de un camión en 2019 en Essex, al sureste de Inglaterra.

No sabía quién era la persona que llamaba, pero creía que me conocía de cuando cubrí esa tragedia en Essex ya que en aquella ocasión tuve contacto con muchas personas de Vietnam.

El camión en el que encontraron a los 39 inmigrantes vietnamitas en 2019 – PA

Le hice algunas preguntas, pero enseguida me sentí frustrada por no poder obtener la información que necesitaba.

Lo que supe fue que había un grupo de unas seis personas escondidas en el camión, pero desconocía su número de matrícula, así como su ubicación y la dirección en la que se dirigía.

Todo lo que sabía en ese momento, por lo que me había dicho la persona que llamó, era que el vehículo estaba en Francia, pero que parecía que había dado la vuelta y que ya no se dirigía hacia su destino original: la frontera con Inglaterra.

Me dijeron que las seis mujeres estaban en el cajón del camión y que habían prendido el aire acondicionado. Me contaron que las personas que estaban dentro tenían mucho frío y estaban en pánico.

Pero aún podían ponerse en contacto con el mundo exterior, y el interlocutor puso a una de ellas en contacto conmigo.

«Hace tanto frío, no para de sacar aire», me escribió una joven desde el camión, que transportaba plátanos. Me dijo que el camión estaba cerrado con una barra de hierro.

También me envió dos videos cortos que mostraban la escena en el interior.

Un video mostraba un compartimento oscuro, y apiladas hasta el techo había cajas de cartón que contenían fruta, dejando sólo unos pocos centímetros de espacio para sentarse en el suelo. Se oyó una tos, y una voz femenina joven dijo en un inglés fluido: «No puedo respirar».

La mujer me dijo que habían subido al camión sobre las 00.30 de la noche anterior. Habían pasado allí más de 10 horas y empezaron a inquietarse cuando los datos de localización de su teléfono mostraron que el camión había cambiado de dirección.

Sin mucho tiempo para pensar, me puse en contacto con colegas de la BBC y periodistas en Francia.

Un periodista del diario francés Le Monde en Londres también había sido contactado, y él alertó inmediatamente a su colega de la redacción de París encargado de los temas sobre inmigración.

Rastreando el camión

La mujer pudo compartir conmigo su localización GPS en directo, a partir de la cual vi que el camión estaba en la autopista E15, cerca de Dracé, al norte de Lyon.

Luego pedí ayuda a un colega francés para contactar con la comisaría de policía más cercana al camión, que pudo ponerse en contacto con ellos y enviarles los datos que teníamos.

La mujer no podía hacer llamadas desde el interior del camión. No tengo claro por qué, pero puede que se debiera al tipo de tarjeta SIM que utilizaba.

Reunimos toda la información que necesitábamos y enviamos continuamente actualizaciones de la ubicación del vehículo a Pham Cao Phong, periodista independiente en París, así como al equipo de la BBC en Europa y a la policía francesa.

De repente, el intercambio de localizaciones se interrumpió: había perdido el camión.

Pero la joven pudo enviarme un mensaje de texto. Me dijo que habían apagado el aire acondicionado y que le costaba respirar.

«Estamos asfixiadas», me escribió.

Hacinadas en el estrecho espacio que vi en el breve video, temí que no tuvieran mucho tiempo para resistir.

Intenté tranquilizarles, diciéndoles que mantuvieran la calma, que intentaran no hablar para ahorrar aire y que la policía vendría muy rápido.

Miré nerviosamente la pantalla del ordenador y luego mi teléfono, esperando noticias.

Después de hablar un rato, me enteré de que, antes de subir al camión, tres acompañantes de la mujer decidieron no ir con ella. No estoy seguro de por qué tomaron esa decisión, pero hicieron una foto de la matrícula del camión.

La foto mostraba que tenía matrícula irlandesa, y en mi teléfono pude volver a ver su ubicación.

La muerte de los 39 inmigrantes vietnamitas en 2019 mostró la gravedad del problema del tráfico de personas – PA

La policía francesa de la región del Ródano nos dijo que había determinado la ubicación del vehículo y que estaba interrogando al conductor.

Le envié un mensaje de texto, pero no creo que leyera mis mensajes: la policía debió de llegar y confiscarle el teléfono.

Las cuatro mujeres vietnamitas dicen que subieron al camión con la promesa de que las llevarían sanas y salvas a Inglaterra.

En cuanto a mí, sentí alivio al saber que ahora estaban a salvo en Francia. «Están seguras», me dije, eso es lo más importante.

Hacia las 17:00 hora local, la fiscal francesa Laetitia Francart, de Villefranche-sur-Saône, informó de que el vehículo resultó ser lituano.

Francart confirmó que cuatro jóvenes eran vietnamitas, una de ellas menor de edad, y las otras dos mujeres procedían de Irak.

Lo que me preguntó es ¿por qué, después de la tragedia en la que murieron 39 personas en Essex en 2019, sigue habiendo mujeres jóvenes de Vietnam que se suben a la parte trasera de un camión para cruzar la frontera?

No encuentro ninguna respuesta definitiva.

Información adicional de Mattea Bubalo.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!